El gran cráter

He decidido viajar a las esferas iniciales

Con prismas degradados veo el destino

Entre nieblas perdurables entre nubes sucesivas

Me esperan los estáticos principios naturales

La mutable reacción de los azares que expanden

Rocas sobre rocas cataclismos cósmicos

Aproximan su llegada reduciendo la historia a segundos

Conformando nuevas leyes favorables

Para quiénes tengan la dicha de adaptarse

Todo será de nuevo la eterna sombra
De las transformaciones 

Otro elemento

La muerte era etérea

Yo viajaba entre luces entre fantasmas

Y veía en la sombra formas del pasado

En el portal entraban suspendidos los cuerpos inertes

Corría agua de cascadas imposibles

Nacían a lo lejos niños de eternidad

Sentía o creía sentir suspiros ancestrales 

Todos coronaban un mismo elemento

Y se alimentaban con sustancias invisibles

Yo alcanzaba a ver los ojos ausentes en la obscuridad

Y soñaba formas arbitrarias que nada representaban

Al fin sobre la niebla los suelos iban hacia abajo

Nada más recuerdo; ahora

He venido aquí, creo estar despierto

Para rezar en la sombra

Corrimos en la noche hacia los deslumbramientos 
Anduvimos en la tenue vigilia para rezar en la sombra
Hasta llegar a la coronación de los causes del tiempo

Miro lo que día desecha a la soledad del pasado

Puedo esperar tu regreso pero es inútil

Es evidente que has olvidado tu nombre

Que ya no recoges tu sombra para llevarla contigo

Que no puedes hablar acerca de lo desconocido

Que ya eres misterio, que tu alma se ha ido

Es evidente tu muerte, al fin y al cabo es un río

Lo que llevamos dentro se va con el último latido

Prefiero pensar que tu verdadero rostro se igualara al mío

Cuando la naturaleza forje mi destino de mortal redimido

Seremos dos, que es un número impreciso
Para el universo donde toda cosa es uno